Detección temprana de Ambliopía
Desde el nacimiento hasta aproximadamente los 6 años, se forman conexiones fundamentales entre los ojos y el cerebro del niño. Cualquier cosa que impida la visión, o bien torne a esta borrosa, puede inhibir el desarrollo de dichas conexiones neuronales.
Cuando esto ocurre, el cerebro empieza a ignorar o suprimir las imágenes procedentes de un ojo, el cual se debilita y pierde agudeza visual.
La causa más frecuente de ambliopía es el estrabismo (desviación de uno o ambos ojos), otras son: cataratas, ptosis palpebral (párpado caído) y alteraciones en la refracción (miopía, hipermetropía, astigmatismo).
Es más frecuente en prematuros y niños con retraso en el desarrollo.
También el factor genético es importante.
La mayoría de los niños no se quejan de problemas en la vista, ya que se acostumbran a ver bien con un ojo y mal con el otro. Una minoría presenta desviación en los ojos o manifiestan signos erróneamente interpretados como «manias»: acercarse al televisor, torcer la cabeza, parpadear, guiñar un ojo, etc. Todo esto trae aparejado problemas en el aprendizaje (no ver bien el pizarrón) y en las actividades recreativas (dificultad para agarrar una pelota al vuelo).
Los diferentes tratamientos: anteojos, parches, gotas oculares, cirugía, tienen como objetivoforzar el cerebro a prestar atención a las imágenes procedentes del ojo ambliope.
Los resultados dependerán de la precocidad en el diagnóstico. Con lo cual los controles oftalmológicos antes de los 6 años de edad son decisivos.
Dra. Alejandra Villalba
– Pediatra –
Integrante del Equipo de Detección Temprana